Lo que no tenía y hasta a veces me sobraba.

El tiempo últimamente se estuvo convirtiendo en una de mis grandes némesis, privándome de manera neutralizante de sus servicios, actuando como un irreverente canalla escapándose eternamente de mis propias manos. Como seguramente habrán observado,  hace poco más de tres meses que no actualizo el blog. Por cuestiones laborales, tal vez. Pero más que nada por el incensante y casi asfixiante limbo masturbatorio/mental al que regularmente me veo sometido. Pero no os preocupéis, muchachos, que lo mejor está por venir. Ustedes fumen, mientras yo… Uh, Mientras yo también.

Deja un comentario